Terapia de pareja
La pareja es uno de los vínculos más importantes de nuestra vida. Cuando una relación comienza lo hace cargada de expectativas, y estas, junto con el momento personal de cada uno crearán las condiciones iniciales de la pareja.
Pareja
A lo largo de una relación, la convivencia, las discusiones, las influencias externas de la familia o distintos cambios (laborales, de residencia, el nacimiento de un hijo, etc.) hacen que aparezcan conflictos que pueden deteriorarla, generando sentimientos de rabia, ira o frustración. Cuando surgen discusiones constantes, problemas de comunicación, falta de intimidad, infidelidad, celos, desconfianza… es el momento de pedir ayuda.
La terapia de pareja puede ayudaros a encontrar nuevas formas de entendimiento en la relación. Trabajando la empatía y la comunicación, desde la propia escucha y la escucha del otro.
Cuando las parejas recurren a la terapia, es a menudo después de que han estado discutiendo durante meses o incluso años, y están buscando la terapia como un último recurso para salvar su relación. En este tiempo, a menudo han asentado en un patrón de argumentos predecibles sobre los mismos temas y parecen condenados a repetir la misma lucha una y otra vez.
La terapia de pareja puede dar la oportunidad de comenzar de nuevo y trabajar con un tercero imparcial para evaluar y realmente reparar la relación. Por otra parte, las parejas deben estar abiertas a hablar honestamente acerca de sus deseos y necesidades, escuchar a los demás, y mantener una mente abierta.
Aquí unos para hacer las sesiones más productivas y exitosas:
Comunicación abierta
Todo el mundo ha oído hablar de que la comunicación es una de las cosas más importantes en un matrimonio o una relación seria. ¿Y si tu y tu pareja habéis tratado de comunicaros entre sí, pero simplemente no os miráis a los ojos? En terapia de pareja, un psicólogo puede trabajar con la pareja para aprender a comunicarse de manera más efectiva con los demás – para expresar sus pensamientos y sentimientos, escuchar sin juzgar, y realmente trabajar juntos para escuchar lo que la otra persona tiene que decir.
Una parte crucial de la terapia de pareja es que os sintáis lo suficientemente cómodos para hablar con franqueza acerca de vuestros problemas en la relación. Este es un momento de honestidad y manejo de la ira. La comunicación es una calle de dos vías: ser capaz de expresar tus sentimientos y luego ser capaz de escuchar también las preocupaciones de tu pareja será un gran primer paso hacia la reparación de la relación.
Los desacuerdos abiertos
Aunque los desacuerdos son lo que muchas parejas están tratando de evitar al venir a la terapia, tener un desacuerdo de una manera abierta y sana puede ser terapéutico. No hay dos personas iguales; las diferencias de opinión están obligadas a venir de vez en cuando. En la terapia de pareja, las parejas son capaces de aprender mejores métodos para que tener argumentos y llegar a acuerdos, como decidiendo juntos no gritar ni poner adjetivos, y dejar que cada persona tenga su punto de vista sin la interrupción de la otra parte.
Está bien que tú y tú pareja no estéis de acuerdo en todo – ambos sois personas con puntos de vista diferentes. La clave es trabajar con la terapeuta para averiguar las razones detrás de tus formas de pensar, y la forma de llegar a un compromiso. A través de la terapia de pareja, la pareja puede aprender a disentir sin explotar, una habilidad increíble que hará maravillas para ayudar a su relación.
Hacer nuestra tarea
Será común que la terapeuta os envíe tareas a casa para trabajar entre sesiones. Hacerlas es una parte vital de la terapia de pareja. Poniendo en práctica lo que se aprende en la hora de terapia favoreceréis que la relación funcione. Para que vuestra relación tenga una oportunidad de sobrevivir, toca utilizar lo que habéis aprendido en la sesión y aplicarlo a situaciones de vuestra vida cotidiana, donde no hay una terapeuta calmada y neutral para mediar.
Para que la terapia de pareja tenga éxito, ambas partes deben acercarse a la terapia con una mente abierta y una disposición a aceptar las diferencias mutuas. Después de todo, lo que os diferencia son las cualidades únicas de cada uno que os llevará a caer en el amor de nuevo. Al resolver y hablar sinceramente, escuchar sin juzgar, y llevar a cabo las tareas de vuestra terapeuta, estaréis mucho más cerca de aclarar vuestra relación de pareja.